La nueva versión del Índice de Gravedad de la Adicción (ASI, por sus siglas en inglés) brinda a los profesionales de la salud la posibilidad de diseñar un plan de atención integral e individualizada a los pacientes con trastorno por uso de sustancias.
El ASI, desarrollado en la (EE UU) en los años 80, es la herramienta más utilizada para estudiar los trastornos por uso de sustancias. Tras más de 25 años de uso, las tendencias actuales han llevado a sus creadores a actualizarlo y ajustarlo a la realidad. Así surge el ASI-6, con importantes cambios estructurales y de contenido sobre la versión anterior.
Pero según explica Eva María Díaz-Mesa, investigadora del Centro de Investigación Biomédica en Red de Salud Mental (CIBERSAM) y primera autora del estudio, “toda prueba de evaluación debe pasar por unos procedimientos matemáticos que determinen si es válida para la medición de una conducta psicológica definida”.