Un equipo de investigadores del Instituto de Biomedicina de la Universidad de León (Ibiomed) dirigido por José Luis Mauriz ha descubierto que una hormona humana, la melatonina, es capaz de frenar el progreso del hepatocarinoma, un tipo de cáncer de hígado de gran prevalencia, con una alta tasa de mortalidad.
Después del cáncer de páncreas, el hepatocarcinoma es el tumor con más mortalidad a los cinco años de padecerse. Suele provocar síntomas poco alarmantes, lo que dificulta su detección. Esto, junto con su carácter agresivo en el hígado hacen que sólo sobrevivan a él entre el 20 y el 25 por ciento de los pacientes tras este periodo.
Los síntomas generales son cansancio, pérdida de peso o dolor abdominal, aunque dependen de la situación fisiológica del paciente y de si padece otras enfermedades. “Estos síntomas pueden ser no muy intensos, o incluso no aparecer estando el paciente asintomático, lo que hace que en ocasiones no se acuda al médico. Y, sin embargo, la enfermedad sigue avanzando”.